4.4.13

LAS ULTIMAS BATALLAS DEL ISONZO. EL AGOTAMIENTO ITALIANO

En el mes de enero de 1917, los representantes Aliados acordaron en  conversaciones en Roma repetir para la nueva temporada la sincronización de sus ataques, como  habían hecho en 1916. Italia actuaría coincidiendo con los episodios en Arrás y el Aisne. Cadorna demandó el 17 de enero  del nuevo año la presencia de tropas anglofrancesas en el valle del Isonzo, petición que  fuede negada por las acuciantes necesidades en otros lugares . No obstante los italianos no pudieron coincidir con sus socios debido al retraso de la primavera en los Alpes aquel año. Los italianos seguían teniendo dudas sobre su escasez  de artillería pesada ( como puede comprobarse en la correspondencia entre entre el directordr del Corrriere de la Sera y Cadorna) y  pidieron a los Aliados de nuevo que suministraran ese material. Por otra parte, al mejorar el tiempo.los sucesos de marzo en Rusia pasaron su primera factura precisamente a los italianos, justo el temor que estos habían expresado en las conversaciones de Roma. Comenzaron a llegar al frente del Isonzo las tropas austrohúngaras trasladadas desde el frente Oriental; precisamente este acontecimiento convenció a los mandos de la necesidad de anticiparse a este traslado y mantener la iniciativa. De este modo, el alto mando italiano decidió lanzar dos ofensivas en la parte sur del Isonzo, depositando el esfuerzo crucial en el 3º ejército en el Carso ( Karst ), aunque sería su vecino el 2º ejército el que tendría un papel protagonista, para bien...y para mal.

 MAPA Y CUADRO. EL VALLE DEL ISONZO; BALANCE DE LAS ONCE BATALLAS DEL MISMO NOMBRE EN 1915-1917

La décima batalla del Isonzo empezó el 12 de mayo de 1917, en la cual el 2º ejército aseguró la mayor parte de las montañas que dominaban el paso a la altiplanicie de Bainsizza. El 3º ejército combatía inmediatamente al sur, pero se vio frenado por contrataques en torno a Kostanjevica. Los combates cesaron el 5 de junio.

A continuación la presión italiana  se traslado al Trentino, con el objetivo de eliminar las posiciones ganadas el año anterior por las fuerzas de la monarquía danubiana, y que podían servir de trampolín para amenazar a los italianos concentrados en el Isonzo con un vasto movimiento envolvente hacia Venecia, peligro que convenía eliminar. Pero los combates en la montaña fueron poco favorables a las armas de Roma, desengañado sus esperanzas. También aquí se paralizó la fracasada ofensiva, el 30 de junio.

En verano, el martirio se reanudo en el castigado Isonzo, en la acción conocida como la undécima batalla: el 21 de agosto el 3º ejército italiano penetró levemente el frente austrohúngaro y seguidamente  aseguró  la mayor parte de meseta de Bainsizza.  El 4 de septiembre los italianos se impusieron en el monte San Gabriele que dominaba la disputada ciudad de Görz ( Gorizia ). Las posiciones austrohúngaras que dominaban el valle en la margen oriental estaban perdiéndose, y en Viena llegaron a la conclusión de que todo su dispositivo se desplomaría si no se invertía la situación urgentemente. Era necesario recurrir a una solución drástica. En consecuencia solicitaron ayuda directa de Berlín. En parte estos temores eran infundados, porque las fuerzas italianas, después de acumular 155.000 bajas, no estaban en disposición de dar un paso mas por bastante tiempo.

2.4.13

TRAGEDIA EN EL CAMINO DE LAS DAMAS ( II BATALLA DEL AISNE )



"Nuestra hora ha llegado", anunció premonitoriamente Nivelle el 16 de abril  a la concentración de "poilus" reunidos al noroeste de Reims en medio de una gélida ventisca primaveral. Era el momento de poner en práctica la ambiciosa teoría ofensiva del comandante en jefe francés, que había prometido a todos una penetración importante en el plazo de 24 horas.

MAPA. EL SECTOR DEL AISNE EN EL CAMINO DE LAS DAMAS ANTES DE LA BATALLA


Las cosas se torcieron desde el principio: el largo bombardeo previo de dos semanas había alertado a los defensores alemanes. El ataque principal discurrió en unos 40 kilómetros de frente, principalmente al este de Soissons, entre Vailly y Brimont. Fue encabezado por los ejércitos 5º ( Mazel )   y 6 º ( Mangin ) con el 10º ( Duquesne ) como reserva, y  ciertamente rompió a lo largo de varios puntos. Según el plan, 16 divisiones de infantería, 2 brigadas de aliados rusos y una división de caballería deberían efectuar un asalto rápido protegidas por una barrera móvil de fuego, limpiar de enemigos  los altos del Camino de las Damas y desbordarse por fin en la carretera local. Pero los asaltantes no pasaron de allí.

El bombardeo previo no dañó suficientemente las alambradas alemanas y la barrera progresiva de artillería cayó en la confusión, en buena parte porque la aviación alemana consiguió dominar el aire y bloquear a los observadores aéreos encargados de guiar el tiro.  Los alemanes habían retirado prudencialmente sus cañones a una distancia suficiente como para mantenerlos intactos, pero lo suficientemente cerca como para acribillar a la infantería atacante cuando esta capturó la primera línea de atrincheramientos. Un ataque subsidiario con 128 carros de combate, expediente inédito entre los franceses, permitió al 5º ejército sobre el flanco derecho plantarse cerca de Juvincourt, antes de ser detenido, puesto que los carros  fueron gravemente dañados o averiados. Los problemas en el estreno de los flamantes blindados franceses, los Schenider CA, fueron múltiples. De hecho empezaron en las áreas de concentración, cuando la infantería  no consiguió en muchos casos levantar pasillos para ellos entre sus propias posiciones. Habían sido asignados 132 tanques   distribuidos entre los 82 de la  Agrupación Bossut ( por el oficial especialista al mando, el comandante Louis Bossut ) que debían apoyar  el ataque del 32º cuerpo hacia Juvincourt, y las 50 unidades correspondientes a la Agrupación Chaubes ( aunque había perdido algunas en los pantanos durante la aproximación ), que haría lo propio con el 5º cuerpo al oeste del arroyo Miette. No hubo elemento sorpresa porque las columnas acorazadas se aproximaron al Aisne a pleno día y fueron avistadas por la aviación enemiga. Aunque una columna de Schneiders logró profundizar hasta 5 km tuvo que replegarse al no ser alcanzada por su infantería, y los artilleros alemanes causaron estragos: la agrupación Bossut perdió 31 vehículos por impactos de cañón ( aparte de otros 13 volcados, atascados o con averías mecánicas ). Entre los tripulantes muertos estaba el propio Bossut cuando dirigía el avance del grupo Nº1. En el sector del 5º cuerpo las pérdidas ascendieron a 26 Schneiders a manos de la artillería, pereciendo 51 tripulantes.
MAPA. EL BAUTISMO DE FUEGO DE LOS BLINDADOS FRANCESES EN EL CAMINO DE LAS DAMAS

 Un tercer ataque al este del Aisne en dirección a Brimont fue contenido por un fulminante contrataque alemán. Mientras esta lucha continuaba, un ansioso Nivelle desplegó un esfuerzo al este de Reims, ocupando los altos de Moronvilliers. Esta ganancia permitió a los franceses escudriñar un amplia area al norte. Los contragolpes enemigos no pudieron desalojarlos. Pero el día 20 la galopante escasez de municiones imponía una pausa, y se  sumaba a un hecho muchísimo peor, los hombres de Nivelle habían encajado nada menos que 187.000 bajas en los combates del conjunto del Aisne, muy lejos de las 15.000 previstas, y su capacidad de sufrimiento se quebró. Cuando se ordenaron nuevos avances, estallaron disturbios en docenas de divisiones. Nivelle había pasado de heroe en Verdun a villano en el Camino de las Damas, tildado de "El bebedor de sangre". El dia 23 de abril el mismísimo presidente Poincare intervino directamente prohibiendo nuevas acciones, lo que a todas luces anunciaba la inminente  defenestración de Nivelle. De todos modos, el 3 de mayo los disturbios aislados dieron paso al "Gran Motín"


MAPA. EL SALDO TERRITORIAL EN MAYO DE 1917

 Pérdida  irreversiblemente la confianza en la estrella del generalísimo francés, todavía se le mantuvo interinamente en el cargo durante la conferencia de Paris a principios de mayo para guardar las apariencias y garantizar a los ingleses que se mantendría la presión hasta que estos desencadenaran su previsto embate  en Ypres a finales de mes. Concluida la conferencia, Nivelle fue definitivamente relegado el 15  de mayo y trasladado discretamente a Argelia, siendo sustituido por su jefe de estado mayor, Petain, precisamente el otro gran héroe de Verdun. La  vacante  a su vez generada en el estado mayor fue cubierta  por Ferdinand Foch, antiguo miembro del equipo de Joffre, y reputado por su incansable fiereza. Los primeros pasos de Petain fueron una cancelación de los procedimientos ofensivos mientras trataba de poner orden en sus convulsas huestes.